Analizando los Oscar: Mejor guión original | La Cabecita

La de Mejor guión original es este año posiblemente mi categoría favorita de los Oscar, y lo es por dos razones. La primera, por lo excelentes que son prácticamente la totalidad de sus nominados, cuatro de las cinco películas nominadas me parece que tienen un guión sobresaliente y que las haría más que justas ganadoras. Y es bastante posible que sea esa quinta nominada, la que me sobra, la que finalmente gane, pero he aquí el segundo motivo por el que este año esta categoría me apasiona, y es que es de las pocas que aún no tienen un ganador asegurado. Aún a día de hoy hay dos películas que tienen prácticamente las mismas opciones de alzarse con los premios, y en una carrera cuyos resultados tienden a ser casi siempre tan predecibles y poco abiertos a las sorpresas, se agradece que haya aún una categoría sin un ganador claro.

Blue Jasmine de Woody Allen

Blue Jasmine

No hay valor más seguro que el de Woody Allen, lo haga mejor o peor, su ingenio siempre estará presente. Ésta es su decimosexta nominación al Oscar en la categoría de Mejor guión (en total ha cosechado la friolera de 24 nominaciones) y ya tiene en su casa tres Oscar en esta categoría por los guiones de Annie Hall (por ésta también su único Oscar como Mejor director), Hannah y sus hermanas y Midnight in Paris. En Blue Jasmine vuelve a demostrar una vez más que estos números no son simple casualidad, es capaz de bordear la línea del melodrama sin perder jamás su ingenio y su sentido del humor, risa ante la mayor de las tragedias. Además crea uno de los mejores personajes femeninos de su carrera, esa Jasmine que parece conectada irremediablemente con las pendientes de San Francisco (no olvidemos que Allen es el mayor retratista que jamás ha tenido la ciudad de Nueva York, y últimamente parece capaz de hacerlo con cualquier parte del mundo). Un guión sensacional, como todos los que tienen su firma. Aunque tiene muy complicado obtener el quinto Oscar de su carrera.

Dallas Buyers Club de Craig Borten y Melisa Wallack

Dallas Buyers

Veinte años estuvieron trabajando Craig Borten y Melisa Wallack en el guión de Dallas Buyers Club, llegando incluso a entrevistarse con el propio Ron Woodroof antes de que este muriera (entrevistas que están grabadas en video y que darían pie a un muy interesante documental). El laborioso trabajo de esta pareja sin lugar se ve reflejado en el magnífico libreto de la película, se adentran a fondo en la mente del protagonista, un protagonista complicado, al que logramos entender antes de que incluso él lo hago, así como en la de los dos principales personajes secundarios. Pero además son capaces de contar tres historias bien distintas, la de una amistad, la de una condena a muerte y la de una guerra contra el gobierno en una sola. Hacen que todo esto fluya de manera absolutamente natural, contundente, como un reloj con una milimétrica precisión. No tengo ninguna duda, Dallas Buyers Club es mi favorita de las nominadas a los Oscar y por supuesto, también en esta categoría, pero ya se metió en extremis, y conseguir el Oscar es prácticamente imposible.

Her de Spike Jonze

Her

Había gente que todavía dudaba y que no veía la enormidad con la que Spike Jonze había firmado los guiones de Donde viven los monstruos y I’m here, muchos aún achacaban su éxito a los guiones por Charlie Kauffman, pero con Her ha dejado claro a todos que es un guionista sensacional. Su fábula futurista está narrada con una extraordinaria sensibilidad, es original, es ingenioso, un guión prácticamente perfecto que ya se hizo con el Globo de Oro y el premio del sindicato de guionistas. A mi el guión de Her tiene algo que me resulta fascinante, y es su análisis, nunca crítica, de los nuevos métodos de comunicación y sobre todo su comprensión de la soledad. Como apuntábamos al inicio, ésta es la categoría cuyo ganador parece menos claro, y el guión de Her tiene muchas posibilidades de ganar, pero poco a poco se ha ido quedando rezagado en beneficio del de La gran estafa americana. Esto, sumado a la reciente acusación de plagio que ha sufrido el guionista, algo que le restará seguro algunos votos de última hora, parece que le dejarán en las mieles del éxito y que finalmente se quedará a las puertas de la victoria, pero como decimos, por muy poco, y sin descartarla del todo.

La gran estafa americana de David O. Russell y Eric Singer

American Hustle

Parece curioso que en un categoría rodeada de la excelencia de cuatro guiones fantásticos, finalmente vaya a ganar el más endeble de todos. Para nada tiene La gran estafa americana un mal guión, pero se queda a años luz de sus rivales. Se podría dividir el guión en dos partes, un gran acierto y un gran error. Es extraordinaria la descripción de todos sus personajes, no es de extrañar que también los actores se hayan beneficiado de esto, pues David O’Russell no es sólo un excelente director de actores, sino que también es un fantástico creador de personajes, que haya colado a cuatro actores dos años seguidos en las categorías interpretativas, algo que nadie había conseguido en la historia, no es casual y se debe principalmente al talento de su realizador. Pero esa perfección que tenía el guión de El lado bueno de las cosas no se refleja en el de su nueva película, porque esta vez O’Russell se ofusca tanto en la elaboración de sus personajes, que a veces parece dejar la trama principal de lado, ésta es algo farragosa y a veces algo complicada de seguir. He oído quejas de muchos espectadores diciendo que no se enteraban de lo que estaba pasando, y no es problema de un guión enrevesado, si no de uno al que en bastante ocasiones le cuesta bien explicar y detallar que es lo que está ocurriendo. Pero pese a todo, la película ha tomado distancia y después de haber ganado el BAFTA ya se perfila como favorita, un pequeño premio de consolación para la única de sus diez nominaciones que logrará consumar.

Nebraska de Bob Nelson

Nebraska

Ya lo comenté al escribir la crítica, no sé hasta qué punto Alexander Payne no colabora en el guión de la película porque es una narración netamente suya con todas sus virtudes. Con su latente humanismo transpirando en la historia de esos personajes absolutamente creíbles y de fondo una historia íntima, pequeña, sencilla, que habla de algo tan difícil de tratar como son las relaciones paterno-filiales. Hay muchos puntos en común que la unen con el guión de Los Descendientes, por la cual Payne ya ganó el Oscar, al igual que lo hiciera con Entre copas, de ganar el Oscar, no subiría él a recogerlo, pero tan solo él y Nelson saben que porcentaje del premio iría para el realizador. Aún así parece complicado que una película de Payne haga triplete en la categoría de guión, no por deméritos propios, pues sin duda sería una más que digna ganadora, si no por méritos ajenos.

Las olvidadas

Podría hablar de varias películas con un gran guión que bien podría estar nominado, pero las mencionaré de refilón, películas como Fruitvale Station, Al encuentro de Mr. Banks, Sobran las palabras o incluso la italiana La gran belleza. Pero esta vez sólo me centraré en una, porque como vengo diciendo varias veces a lo largo del artículo esta categoría roza la excelencia, y la podría haber consumado del todo con un quinteto espectacular si el lugar de La gran estafa americana lo hubiera ocupado A propósito de Llewyn Davis de Los hermanos Coen. Porque los Coen han firmado su mejor película en años, también una de sus obras más marcianas (dentro de lo muy marcianos que ya son ellos de por sí), sus personajes, en esta ocasión son más perdedores que nunca, más ruines, más rastrero, y eso es algo que me seduce por completo de su protagonista, ese despojo humano con el que los Coen se vuelven a acercar a la obra de Homero de forma espectacular, siendo además de dar uno de los giros más inteligentes y sabios que he visto en una obra actual. Una verdadera lástima que la categoría se quede en casi excelente, pudiendo haberlo sido del todo.

Nuestro quinteto: A propósito de Llewyn Davis / Blue Jasmine / Dallas Buyers Club / Her / Nebraska.

Debería ganar: Dallas Buyers Club.

Ganará: La gran estafa americana (con una pequeña posibilidad de que finalmente sea Her).