El origen del planeta de los simios – ¡Yo os maldigo! | La Cabecita

Más de 40 años han pasado desde que se estreno la película original de El Planeta de los Simios, por el camino, ha habido infinidad de secuelas, un innecesario remake, que supuso lo peor de la carrera de Burton, hasta que ahora, por fin, a alguien se le ocurría cual era la mejor manera de explotar esta saga, y como, en lugar de estirar el chicle, podían sacarle provecho a una historia de la que quedaba mucho por contar.

Y es que realmente el planeta de los simios terminaba con esa maravillosa escena de Charlton Heston maldiciendo a la humanidad delante de la estatua de la libertad, todo lo que vino después no tenía ni gracia, ni interés. Pero quedaba saber una cosa, quedaba saber cómo los simios se hicieron con nuestro planeta, y eso es, precisamente, lo que nos viene a contar esta película.

No podemos decir que sea una precuela necesaria, pero si interesante, y muy bien enfocada, no se limita simplemente a narrar ese levantamiento de los simios, si no que trae consigo una historia muy interesante, apoyada en un guión de peso perfectamente trabajado.

Y aunque sabemos a la perfección hacía dónde nos lleva la película, el camino hasta llegar allí está perfectamente llevado, de una forma angustiosa, regalándonos escenas maravillosas como la aparición de Cesar salvando a John Lithgow (magistral, como siempre), o la primera vez que ese ejército se forma.

Toda la recta final es de infarto, no solo está narrada con una crudeza brutal, regalándonos escenas bastante violentas, sino que además es capaz de envolver al espectador en un puño, del que es difícil salir hasta que la película no da el carpetazo final. Toda la escena del Golden Gate esta llevada con un pulso enorme, puro entretenimiento.

Aunque si algo merece ser destacado por encima de todo en el planeta de los simios son sus maravillosos efectos especiales, absolutamente excepcionales, no solo a la hora de crear esa maravillosa raza de monos que realmente tiene vida propia y cuesta creer que están generados mediante ordenador, si no todas las escenas finales, un trabajo laborioso y bien cuidado y que no sería de extrañar que se viese reconocido cuando llegue la temporada de premios.

Una gran película, y una muestra de cómo se pueden reciclar ideas consiguiendo innovar y creando material nuevo que resulte interesante. Una buena producción y una película que desde luego hace pasarlo en grande, cosa que en estos días a veces parece demasiado pedir.

3.5_estrellas