Tiempo es la última y esperada película de M. Night Shyamalan. El director indio ha convertido su obra, su filmografía, en un objeto de estudio muy curioso. Quizá hasta podamos hablar de tres épocas. La buena, la mala y la de recuperación. Justo en ese orden. La buena hasta La joven del agua, la mala hasta La visita, donde volvió la luz al final del túnel. La etapa de recuperación es algo irregular. Tiempo es de sus obras dentro de esta etapa que responde a una irregularidad que quizás tambalee esa recuperación. No es una mala película pero quizás patina en tantas cosas que pone al director, otra vez, en el punto de mira de las «hienas» cinematográficas. Es innegable a M. Night Shyamalan. no le ha salido una obra redonda. Aún así, tiene elementos que hacen que la obra del autor tenga una defensa digna.
La trama, que escribe el propio director, está basada en una novela gráfica en blanco y negro puro Castillo de arena de los creadores Pierre-Oscar Lévy, Frederick Peeters. Una obra de terror, pero no el terror convencional del que estamos ya relativamente acostumbrados. Este terror tiende a lo existencial, elude el gore, elude la sangre, elude el golpe de sonido. Elude todo tipo de convencionalidad del genero para centrarse en la experiencia «toda tu vida en un mismo día».
Aquí está su gran defensa, su premisa, pero, evidentemente, una trama no se basa en exponer premisas, se basa en desarrollar esas premisas, y aquí se presenta su gran némesis. El desarrollo de la propia premisa, y de los giros de guión, suficientemente interesantes para devolverte la esperanza en la trama, no hace más que pegar resbalones, aspavientos narrativos, sobreactuaciones, diálogos que resuenan a la desgracia de The Happening.
Esta es la fantasía de Tiempo esa dicotomía que se nos presenta a los que, por un lado siguen la carrera del director, como a los cinéfilos entendidos. Quizá esta experiencia nos hace más analítica por profesión. Aún así, con todo esto sobre la mesa, la película tiene lo que tiene que tener para que cualquier persona, quizá más ajena al periodismo o al análisis, disfrute mucho. Y es una defensa igual de plausible.
Tiempo es una experiencia que no se mueve en esa fina línea de mantener una premisa puramente existencial pero con un desarrollo «accesible» que, sin duda alguna, dejará un pozo enorme para el diálogo posterior. Para pensarla y discutirla después del visionado. Una película que generará debates de todo tipo, argumentales, identitarios (¿Qué hubiera hecho yo?).
Finalmente, Tiempo pertenece a la época de recuperación del director, con lo peor y lo mejor del director, pero de nulo arrepentimiento. Perfecta para el verano.
Crítica escrita por Deva Hernández
Título original: Old Director: M. Night Shyamalan Guión: M. Night Shyamalan Música: Trevor Gureckis Fotografía: Mike Gioulakis Reparto: Gael García Bernal, Vicky Krieps, Thomasin McKenzie, Rufus Sewell, Abbey Lee, Ken Leung, Alex Wolff, Eliza Scanlen, Embeth Davidtz, Aaron Pierre Distribuidora: Universal Pictures Fecha de estreno: 30/07/2021