El director danés que cautivó a toda una generación con La peor persona del mundo, regresa con su misma protagonista (Renate Reinsve) para realizar la que en mi opinión es su mejor película hasta el momento. Valor sentimental ha pasado prácticamente por todos los festivales importantes del mundo tras estrenar en Cannes en donde se alzó con el gran premio del jurado que la colocó ya desde entonces como una de las favoritas a pelear por el Oscar a mejor película internacional. Una preciosa oda al cine y a la familia llena de luz y vida.
Joachim Trier compone una reflexiva obra sobre cómo la vida imita al arte y cómo respectivamente el arte hace lo propio como espejo de nuestra alma. Valor sentimental cuenta la historia de Nora y Agnes, dos hermanas muy unidas que han tenido que crecer con la figura intermitentemente ausente de un padre director de cine que tras el fallecimiento de su madre prácticamente las abandonó y ahora años después vuelve a aparecer en sus vidas con una sorprendente propuesta. La inesperada oferta que sacude por completo la estabilidad de ambas hermanas, es la de un papel protagonista para Nora, en el que supondrá su esperado regreso al cine después de más de una década sin filmar nada. Nora es una respetada actriz de teatro que vive intensamente su profesión, con una vocación que a menudo se ve afectada por un estado mental de constante ansiedad derivado de unas heridas no cicatrizadas de un pasado que no la deja avanzar en la vida. Cuando Nora rechaza el papel por no querer tener el más mínimo trato con su padre, ésta ve cómo el proyecto sale adelante y en su lugar su padre ha contratado a una joven estrella de Hollywood, que decide ponerse en contacto con ella para lograr una aproximación lo más real posible a un personaje que claramente está basado en la propia Nora. Algo que nuevamente pondrá patas arriba la estabilidad de la relación entre padre e hija y acabará por afectar también a su otra hermana.

Valor sentimental es una elegante película de una pulcritud casi absoluta, que nos traslada a una esencia cinematográfica deudora de Bergman, en el que los paralelismos entre vida y cine se entremezclan para dar paso a algo mucho más grande que la propia autoría de una obra como es la paternidad y el sentido de la vida. La vida de los miembros de una familia fragmentada hace equilibrios para sostenerse, soportarse y consolarse de la única manera que conocen y saben.
Un precioso retrato familiar que pasa por recalcar la importancia de la responsabilidad afectiva en las relaciones paterno filiales y por poner en valor la capacidad terapéutica del arte en sus diferentes expresiones, como perfecto vehículo en el que volcar todas tus frustraciones y devociones como camino a la sanación personal.

Trier hace una asertiva radiografía de las relaciones humanas del mismo modo que ya lo hizo en La peor persona del mundo, pero atinando mucho más el tiro y con un resultado extraordinario y conmovedor. Valor sentimental tiene en su haber uno de los mejores repartos del año con unas interpretaciones a cargo de Stellan Skarsgård, Renate Reinsve, Inga Ibsdotter Lilleaas y una sorprendente Elle Fanning con muchas, muchísimas opciones de arrasar en nominaciones y premios durante la carrera al Oscar de próximo año.
Valor sentimental es una de mejores e imprescindibles películas de este año capaz de conmover de una forma verdaderamente especial. Una cinta luminosa, repleta de belleza, dolor y esperanza que como la propia vida, hace un recorrido por muchas emociones que ayudan a retratar y entender la naturaleza humana del amor y del Arte como máxima expresión. Una joya.
Título original: Blue Moon Director: Joachim Trier Guión: Joachim Trier, Eskil Vogt Fotografía: Kasper Tuxen Música: Hania Rani Reparto: Renate Reinsve, Stellan Skarsgård, Inga Ibsdotter Lilleaas, Elle Fanning, Anders Danielsen Lie, Jesper Christensen, Lena Endre, Cory Michael Smith, Distribuidora: Elastica Films Fecha de estreno: 05/12/2025

