Aquaman y el reino perdido – Secuela pasada por agua | La Cabecita

Es un secreto a los cuatro vientos que el universo cinematográfico de DC Cómics está literalmente atravesando su peor momento en años. Tras los recientes fracasos de The Flash y sobre todo Blue Beatle, el estudio que ahora tiene como director creativo a James Gunn, al fin ha estrenado la secuela de exitosa Aquaman, una segunda parte que llega irremediablemente tarde y con una desastrosa narrativa por cancelación de la que todos somos conscientes y que ha intentado salvar los muebles cómo ha podido.

Cuando en 2018 el maestro del terror contemporáneo James Wan, se unió a DC para dirigir la primera entrega cinematográfica en solitario del superhéroe acuático, nos sorprendió tanto a propios como a extraños, pero el resultado fue sorprendentemente refrescante y muy muy divertido. Wan jugaba a no tomarse en serio la aventura, pero a la vez aportaba un efectivo arco de personajes que dio como resultado una película muy por encima de las expectativas generadas al respecto. Había camp, pero también había mucha alma y muchas ganas de hacer que el público pasara un buen rato. Algo que muy probablemente hubiese ocurrido también en su segunda entrega, de no ser por la presión social del fandom más tóxico que pedía a gritos la cabeza de Amber Heard (Mera interés romántico de Aquaman y co-protagonista de la primera parte) como consecuencia de la viralización del proceso judicial por agresiones y divorcio con la estrella Johnny Depp. Como consecuencia de ello, el film ha llegado con mucho retraso, varios tijeretazos de montaje para intentar eliminar lo máximo posible la presencia de la actriz en el metraje final y con varias escenas descaradamente rodadas a posterior para tratar de “justificar” narrativamente la ausencia de la misma.

Aquaman y el reino perdido es una secuela tardía y pasada por agua, de la cual es francamente difícil elaborar un análisis sin tener en cuenta lo que sabemos que podría haber sido y no fue. Haciendo un esfuerzo por tratar de obviar esto, el film resultado es una segunda parte muy formulaica y entretenida que por momentos muestra a un James Wan muy desatado homenajeando a clásicos como La cosa (John Carpenter, 1982)y elaborando una película con clara vocación camp con guiños al cine de bichos y monstruos de la serie B, así como al terror más disfrutón. El problema, por así decirlo, es que todo eso no es capaz de eclipsar los graves problemas de montaje que sufre una cinta en la que la presencia de los personajes femeninos ha pasado de ser el motor y corazón de la primera entrega, a ser elementos meramente decorativos y funcionales en una secuela que no parece haber sido creada por los mismos que firmaron la predecesora.

Unos de los elementos que mejor salen parados en esta segunda parte, es el cambio de protagonismo que pasa a estar centrado en el tándem que forman los dos hermanos (Aquaman y King Orm) ambos interpretados por Jason Momoa y Patrick Wilson respectivamente. La idea de rescatar del destierro al hermano malvado para ayudar a Arthur Curry a salvar el mundo, funciona como concepto y como resultado. Ambos intérpretes tienen química juntos y eso casi consigue que no pienses en los problemas ya mencionados anteriormente. Nicole Kidman (la reina madre Atlanna) limita también su presencia en la entrega, pero al menos su personaje cumple con la función que le corresponde y nos recuerda hasta en escasos minutos en pantalla que ella sabe perfectamente en qué película está y por qué es la reina madre.

El enemigo común en esta secuela es el mismo que en la anterior Black Manta, solo que frustrado por no haber podido vengar la muerte de su padre, no se detendrá ante nada para derrotar a Aquaman de una vez por todas. Pero esta vez vuelve con un as bajo la manga. Black Manta se ha hecho con el mítico y poderoso Tridente Negro, que está magicamente conectado con una ancestral fuerza antigua capaz de poseer y maldecir todo lo que toca. De este modo James Wan nos presenta que Aquaman y el reino perdido es una aventura compartida en la que Arthur tendrá que aunarse con su hermano para tratar de proteger a la familia que ha creado y el planeta por el cual siente la obligación de salvar.

Un obsceno festival de efectos especiales digitales poco pulidos, entroncan de nuevo con la idea y el aspecto de que esta segunda entrega tiene vocación de cine de serie B de la última estantería al fondo del videoclub. Aquaman y el reino perdido cumple con el cometido de entretener (y mucho) a su público, pero ni tan siquiera eso compensa que nos hayan entregado una película que sabemos a ciencia cierta que difiere mucho de la que era originalmente. Pese a eso se deja ver sin ninguna dificultad.

Título original: Aquaman and The Lost Kingdom Director: James Wan Guión: David Johnson  Fotografía: Don Burgess  Música: Rupert Gregson-Williams Reparto: Jason Momoa, Patrick Wilson, Amber Heard, Yahya Abdul-Mateen II, Nicole Kidman, Dolph Lundgren, Randall Park, Pilou Asbæk, Temuera Morrison Distribuidora: Warner Bros. Pictures Fecha de estreno: 20/12/2023