Con La profesora de historia uno puede ir en cierto modo “engañado”, pues no estamos ante un drama sobre estudiantes en conflicto o al menos no únicamente. En el fondo de esta película hay una voluntad de hablar de algo mucho más importante y trascendente; la Shoah («La Catástrofe»), el genocidio perpetrado por los nazis en la Segunda Guerra Mundial que acabó con la vida de millones de judíos. De hablar en definitiva de una de las etapas más oscuras y lamentables de la historia de la especie humana. Y centrarse especialmente en las vidas de todos los niños y adolescentes que fueron mandados a campos de trabajo y/o exterminio.
La historia no se aprende, se comprende cita la profesora protagonista Anne Gueguen en un momento importante de la cinta, lema bajo el cual se desarrolla todo el proyecto en el que participan los conflictivos alumnos de una clase de un instituto francés y que tiene por objetivo que conozcan y sean conscientes del verdadero significado que supuso ese período histórico. Se trata de un proyecto a nivel estatal en el que participan varios colegios y que tiene por objetivo preservar la memoria y la conciencia de los hechos que sucedieron, para así aprender a mirar el mundo que les rodea y el suyo propio de otra forma: a mirar de manera lúcida, real, madura y perpleja.
Y es que una de las cosas más fascinantes de esta película es el retrato de la figura del profesor, que no debe limitarse únicamente a repetir la lección con el objetivo de que sus alumnos saquen las mejores calificaciones sino que aprendan a conocer y a ver la vida a su entorno como nunca antes la habían visto. Una más que honorable actitud por parte de un profesor que no ejerce únicamente como tal sino que lo hace como educador en el sentido más pleno y fundamental de la palabra.
Sin embargo, es cierto que nos encontramos ante una cinta sobre la enseñanza y qué formalmente así se desarrolla. Las reminiscencias con la cinta francesa de Laurent Cantet En la clase (2008) son totalmente comprensibles. Y es que uno de los puntos fundamentales de la película se centra en mostrar la riqueza de alumnos que se encuentran hoy en día en muchas de las aulas de los países europeos y de Francia en particular; en los conflictos, las confusiones y las dudas que viven ellos mismos pero también sus profesores. Y en la búsqueda de proyectos que, independientemente de la nacionalidad, religión u origen de cada uno puedan unir a todo un colectivo en la obtención de un conocimiento universal. El cual no admite o no debería admitir distinciones de ningún tipo a la hora de educar.
En ese sentido es importante la escena que abre la película y que sirve como muestra de esa variedad de culturas en nuestra sociedad y de los conflictos que al mismo tiempo genera. Porque aunque queremos creer que estamos avanzando, en las pequeñas anécdotas y situaciones, ya sea en un pasillo de instituto o en el interior de un bus, pueden estar las claves de dónde nos encontramos y sobre todo hacia donde vamos. Los juicios de valores están a la orden del día en nuestra realidad y el quid de la cuestión se encuentra, como siempre, en la juventud y su educación.
Ficha técnica:
Título original: Les héritiers Director: Marie-Castille Mention-Schaar Guión: Marie-Castille Mention-Schaar Fotografía: Myriam Vinocour Reparto: Ariane Ascaride, Ahmed Dramé, Geneviève Mnich, Xavier Maly, Martin Cannavo,Noémie Merlant, Stéphane Bak Distribuidora: A contracorriente Films Fecha de estreno: 15/05/2015