Diez cosas que quizá no sabías sobre Candyman | La Cabecita

Candyman

No digas tres veces el nombre de Candyman delante del espejo, porque se te aparecerá a mitad de la noche y las consecuencias no serán demasiado buenas. Bernard Rose estrenaba hace hoy 22 años uno de los mejores slasher de la historia del cine, heredera clara de la época dorada del género en los años 80. Aprovechamos para contaros diez cosas que quizá no sabíais sobre ella.

Título original: Candyman
Director: Bernard Rose
Fecha de estreno: 16 de octubre de 1992

► Las abejas fueron criadas especialmente para la película. Tenían que asegurarse de que las abejas que sólo tenían 12 horas de edad pareciesen abejas adultas, pero que su aguijón no fuera lo suficientemente potente como para hacer ningún daño real.

► Las escenas de los pasillos y las escaleras fueron filmadas en realidad en las viviendas de protección oficial de Cabrini-Green. Los productores tuvieron que llegar a un acuerdo con los miembros de la pandilla gobernante para ponerlos en la película como extras y que no hubiera ningún problema de seguridad. Aún así, un francotirador se puso en la camioneta de producción, por si llegaba a haber algún problema, aunque nadie resultó herido.

Alan Paul comenta en los comentarios del DVD que si Virginia Madsen no hubiera estado disponible, su papel hubiera ido para la entonces desconocida Sandra Bullock.

Eddie Murphy fue una de las opciones que se barajaron para interpretar a Candyman.

► La frase «Sweets to the sweet» que aparece escrita en las escenas de los crímenes, es en realidad un verso de William Shakespeare en Hamlet.

► Hay una máscara de Guy Fawkes colgada junto al espejo del cuarto de baño de Helen.

Bernard Rose le preguntó a Philip Glass si podía componer la partitura de Candyman. Glass aceptó y escribió una banda sonora de un tono gótico para coro y órgano de tubos. La versión final de la película decepcionó al compositor, sintió que le habían manipulado. Lo que le presentaron como una película de bajo presupuesto e integridad creativa, en su opinión, se había convertido en un slasher más de Hollywood de bajo presupuesto. Como consecuencia de esto, Glass no dejó comercializar la banda sonora de la película hasta 2001.

Virgina Madsen afirmó que mientras rodaba la película llegó a ser hipnotizada de verdad en alguna escena.

► Como Virginia Madsen tenía alergia a las abejas, mientras se rodó la escena de las abejas, hubo siempre una ambulancia presente en el set.

► En la escena en la que las abejas se ponen en la boca de Tony Todd, se utilizarón abejas de verdad. La única protección que tenía el actor era un protector bucal para impedir que pasasen a través de la garganta.