Especial Tom Hanks I – Cumpleaños y éxito en la comedia como aperitivo de una grandiosa carrera | La Cabecita

Hoy es un día especial para La Cabecita, tal día como hoy hace 55 años nació mi segundo actor preferido: Tom Hanks. Hay que celebrarlo a lo grande, por esa razón, y al coincidir en vacaciones, voy a comenzar un especial sobre su carrera cinematográfica, en la misma línea que el que hice sobre Nicolas Cage allá por Enero, aquél tuvo mucha aceptación y es algo que me gusta hacer por lo que ahora es el turno de Hanks. Será una entrada por día, no muy extensas porque ya sabéis que soy partidaria de la idea de que si algo se puede escribir bien en pocas palabras no hacen falta más, consistirá en un repaso a lo largo de sus títulos más importantes y otros datos de interés. Espero que lo disfrutéis tanto como yo, ¡muchas gracias lectores!

Como muchos otros actores de su época Tom Hanks empezó desde la pantalla pequeña, Bosom Buddies fue una sitcom de principios de los ochenta en la que Hanks compartía protagonismo con Peter Scolari y cuyos dos años en antena aprovechó al máximo. Su éxito televiso no fue tan notable como el de otros, como por ejemplo el de Bruce Willis y Luz de luna pero a Tom no le hicieron falta muchas series para llamar la atención de Hollywood. En 1982 hizo un primera película (para televisión), El umbral del juego significó un paso adelante para la vida personal de Hanks aunque no para su carrera profesional, fue un batacazo pero al ser una emisión tan limitada tampoco le influyó negativamente. Dos años después llegó su debut con Despedida de soltero, una película rebelde, que se reía de sí misma y contentaba a todo el público, en Bachelor Party, Tom demostró su buen hacer en la comedia

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En 1984 Ron Howard llamó a la puerta de Tom Hanks, quién les diría años después que harían cuatro películas juntos. 1, 2, 3… Splash pasó sin pena ni gloria por la vida de Hanks pero sirvió para darnos cuenta de que poseía un carisma que apuntaba alto, por ello a pesar de la mala crítica y los nefastos resultados en taquilla esta comedia romántica fue un bonito descubrimiento para muchos espectadores. Sólo era el principio. De este modo Hanks encadenó una serie de filmes en los que él era el protagonista absoluto, entre ellos Voluntarios, El hombre con un zapato rojo o Nada en común, películas que aún así no desprendían calidad. Pero en 1986 apareció otro filme de impulso similar a Despedida de soltero, Esta casa es una ruina pasó a la historia por escenas tronchantes de un Tom Hanks que volvía a triunfar en la comedia. La mejor escena de la película la protagoniza Tom, os animo a que la veáis porque la risa del final no tiene precio.

Mil veces adiós fue la primera incursión de Hanks en el drama, con el romance de fondo pero esta vez no había bañeras que se caían al piso de abajo ni tampoco strippers con las que disfrutar. El éxito asomó pronto en la carrera de Tom Hanks pero no fue hasta 1988 cuando de verdad el actor se dio a conocer mundialmente por un papel inolvidable y entrañable como pocos, su papel en Big le dio una nominación a los Oscar y otra a los Globo de Oro. Y es que, ¿quién no recuerda ese baile en el piano gigante? Mítica película que sacó el lado más travieso de todos los espectadores en su día y también en la actualidad. Soberbio Hanks que ahora sí, se estaba consagrando como el grandísimo actor que empezaba a ser. Como dato curioso, el guión de Big corre a cargo de la hermana de Steven Spielberg, quien años después tendría muy en cuenta a Hanks. En ocho años Tom ya avisaba, nominación al Oscar incluida esto sólo podía significar algo bueno.

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La primera parte del especial termina aquí, mañana sigo con otra tanda de películas que marcaron su carrera, ahora llega lo verdaderamente bueno. En un día como hoy solo tengo palabras buenas para Tom, es un actor que ha demostrado sacrificio siempre que tenía que hacerlo (perdió entre 18 y 25 kilos para rodar Naufrago) y que siempre recibe los proyectos con ilusión. Me encanta por la magia que derrocha en la gran pantalla, eleva la calidad de todas las películas con su simple presencia. Es uno de esos actores que te encuentras muy pocas veces en la vida. Con 55 años hay quien puede decir que ya ha pasado lo mejor de su trayectoria, no lo apoyo aunque tampoco lo niego, solo espero que llegue un proyecto en el que vuelva a dejarnos sin palabras, como siempre ha hecho. Gracias y ¡felicidades Tom!