Quédate en casa II: 15 películas rodadas en una sola localización para amenizar el confinamiento | La Cabecita

Nuestro país (y el resto del mundo) está atravesando una situación sin precedentes. Un aislamiento forzoso para combatir la Covid19. Un virus que nos obliga a permanecer en nuestras casas y a extremar la precaución en cuanto a la higiene y la seguridad se refiere. Por ello y como sabemos que no está siendo fácil para muchos, desde la redacción de La cabecita queremos poner nuestro pequeño granito de arena y ayudaros a entreteneros de la única y la mejor manera que sabemos: con el mejor cine.

Sabemos que para entender a los demás hay que ponerse en la piel de ellos y por eso hemos elaborado una lista de películas para ver y disfrutar en casa, que han sido rodadas en una misma localización. Así de este modo descubriremos juntos diferentes joyas del séptimo arte protagonizada por personajes que al igual que nosotros, están encerrados en casa. ¿Nos acompañáis por este insólito viaje a través del cine? Grandes autores, así como directores de diferentes géneros, han contribuido a crear este curioso subgénero de películas en una sola localización. Hay lugar para el terror, el cual tiene dentro del mismo su propio subgénero popularizado como el nombre de home invasion. Pero también hay lugar para el thriller, el cine clásico, la ciencia ficción o incluso la comedia. Aquí os dejamos nuestra segunda selección de 15 películas para que veáis una por cada día de esta segunda e interminable cuarentena.

 

 1. Un cadáver a los postres, Robert Moore, 1976

Empezar la lista con un clásico pendiente siempre es buena opción, pero más aún cuando se trata de esta joya de la comedia que revisita la ya mítica historia de un palacio con asesinato a media noche y muchos sospechosos y un solo culpable. Esta particular comedia de crimen y misterio es probablemente la mejor versión que se haya rodado del juego del Cluedo y cuenta en su haber con estrellas de la talla de Alec Guinness, Peter Sellers, Maggie Smith, James Cromwell y el debut en la interpretación del honorable escritor Truman Capote.

Una desternillante comedia que te hará morirte de la risa justo a tiempo para adivinar quién es el asesino.

2. No respires, Fede Álvarez, 2016 (Netflix)

Lo que parecía el atraco perfecto se acaba convirtiendo en una pesadilla tan retorcida como su protagonista. Esa podría ser una acertada síntesis de No respires, segundo trabajo en la dirección de Fede Álvarez quien aquí vuelve a demostrar su talento para helarte la sangre siempre que se lo propone. La historia es sencilla: un grupo de jóvenes ladrones de poca monta se adentran en una casa habitada solo por un hombre adulto invidente que esconde miles de dólares en algún rincón de su sucia casa ¿Dónde está el problema? Que el hombre en cuestión es un ex-soldado psicópata que jugará con ellos al ratón y al gato hasta la muerte.

3. La casa del diablo, Ti West, 2009 (Filmin)

Uno de los mejores homenajes que se hayan filmado sobre el cine de los 70-80 llega firmado por Ti West. La casa del diablo cuenta la historia común de una muchacha que trabaja como canguro ocasional para pagarse los estudios y una noche de eclipse lunar se topa con que ni la casa ni los clientes que le han tocado esa noche son lo que se dice “normales”. Ahora cada nueva habitación de esa casa le despejará sus más temidas sospechas y tendrá que mirar cómo escapar antes de que sea demasiado tarde.

Tanto su sensacional estética, como su inquietante historia te trasladarán a la época dorada del mejor cine de terror de los años 80.

4. Perfectos desconocidos, Álex de la Iglesia, 2017 (Netflix)

El singular director español es especialista en rodar comedias negras desarrolladas en una sola localización. De hecho pareciera como si fuese su nueva obsesión Mi gran noche (2015) y El bar (2017) son el perfecto ejemplo de ello, pero fue Perfectos desconocidos la comedia con la que rompió todos los récords de taquilla en su año. En ella un grupo de caras muy conocidas capitaneadas por Belén Rueda y Eduard Fernández que se reúnen a una mesa a cenar con sus mejores amigos improvisando un juego: dejar todos los teléfonos móviles sobre la mesa y leer en voz alta cualquier mensaje entrante o contestar a cualquier llamada con el manos libres activado y todo esto durante un impresionante eclipse de luna roja ¿El resultado? Ya lo podéis imaginar.

5. Moon, Duncan Jones, 2009 (Movistar+) 

El espacio puede ser un lugar tan inhóspito como perturbador, buena muestra de ello es el debut en la dirección de Duncan Jones, quien con Moon filmó un inquietante relato de ciencia ficción sobre la soledad protagonizado por Sam Rockwell. Moon cuenta la historia de un astronauta que lleva aislado en una misión de excavación en la luna que descubre un desolador secreto en su último día de trabajo, justo antes de ser sustituido por quien menos lo pensaba.

Un correcto ejercicio de terror psicológico tan desasosegante como revelador.

6. La cabaña en el bosque, Drew Goddard, 2012 (Movistar+) 

¿Alguna vez has visto una película de terror en la que un grupo de jóvenes se iban a pasar un fin de semana a una cabaña en el bosque? Sí es así olvídalo, porque absolutamente nada de lo que hayas podido ver se parece a La cabaña en el bosque. El debutante Drew Goddard avalado y producido por Josh Whedon (creador de Buffy cazavampiros) creó una fantasía con tintes de comedia negra y terror que aún a día de hoy sigue siendo toda una sorpresa francamente refrescante dentro del género.

7. La habitación de Fermat, Luis Piedrahita, Rodrigo Sopeña, 2007 (Movistar+) 

A veces una película casi sin quererlo se convierte en una tendencia a seguir. La habitación de Fermat es un thriller matemático creado por la perspicaz mente del cómico Luis Piedrahita y el guionista Rodrigo Sopeña. Juntos escribieron y dirigieron la película basada en el entretenimiento actual más popular de este y otros países: las escape rooms. La idea es aparentemente sencilla, 4 profesionales  matemáticos son invitados a una casa a intentar desvelar el mayor enigma numérico jamás creado, pero lo que encontraron fue una trampa mortal y un sin fin de enigmas que tenían más que ver con ellos mismos que con las matemáticas.

8. The Haunting (La guarida), Jan de Bont, 1999 (Movistar+) 

El terror digamos “familiar” fue todo un fenómeno durante la década de los 80-90. Grandes franquicias como Los Gremlins o Cazafantamas se hicieron su agosto con ellas, pero si hay un elemento que siempre ha fascinado al público de cualquier generación eso son las casas encantadas. Jan De Bont (ávido director de fotografía reconvertido a director) venía de hacerse de oro con éxitos como Speed y Twistter cuando decidió firmar su particular versión de la mítica historia del caserón de Hill House en donde el Dr. David Marlow (Liam Neeson) invita a tres desconocidos (Catherine Zeta-Jones, Owen Wilson y Lily Taylor) para realizar aparentemente un estudio sobre el insomnio, pero eso es solo un pretexto, la mansión está encantada y ahora junto a ellos tratará de desvelar sus terroríficos secretos.

Probablemente no es el mejor ejemplo como película de terror adulta, pero desde luego es un exquisito cuento endiabladamente entretenido para ver justo antes de irse a dormir.

9. Canino, Yorgos Lanthimos, 2009 (Filmin)

Las películas rodadas en una sola localización es un terreno en el que el cine de autor a menudo encuentra la excusa para rodar una obra maestra. Canino es el perfecto ejemplo de película autoral atemporal capaz de volarte la cabeza en esta y en cualquier otra década. El griego Yorgos Lanthimos consiguió su primera nominación al Oscar en la categoría de mejor película extranjera (ahora rebautizada como mejor película internacional) con esta inquietante cinta en la que matrimonio toma la decisión de educar a sus tres hijos en el más absoluto aislamiento siendo educados y criados únicamente por sus padres, siendo una compañera de trabajo del padre el único contacto permitido con el exterior. El resultado es una película poderosa y demoledora que te helará la sangre y demostrará de dónde viene el dicho popular de que “los griegos están locos”.

10. La autopsia de Jane Doe, André Øvredal, 2016 (Amazon Prime Video)

André Øvredal consiguió el premio especial del jurado del Festival de Sitges con una tétrica cinta desarrollada íntegramente en la morgue. La autopsia de Jane Doe narra la historia de un cadáver sin identificar que llega hasta una funeraria de una pequeña localidad en donde el dueño de la misma y su hijo se disponen a hacerle la autopsia a un cadáver que quizá no está tan muerto como parece.

Un film perverso de un ritmo y tensión únicos.

11. Hush, Mike Flanagan, 2016 (Netflix)

El notable director de terror y suspense Mike Flanagan realizó varias producciones para la plataforma de streaming más famosa del mundo (Netflix) y la primera de ellas fue la desesperante Hush. Un film protagonizado por su musa y esposa Kate Siegel en la que interpreta a una popular escritora que se quedó sorda tras un accidente años atrás y que ahora vive aislada de forma apacible en una casita en el bosque, hasta que una noche descubre que un acosador intenta entrar en su casa. Otro ejemplo idóneo del juego del gato y el ratón con altas dosis de suspense e ingenio.

12. Calle Cloverfield 10, Dan Trachtenberg, 2016 (Amazon Prime Video)

El potente debut cinematográfico de uno de los artífices de capítulos de la serie Black Mirror y The Boys es una claustrofóbica cinta que tiene lugar en un bunker bajo tierra en la que la protagonista (Mary Elizabeth Winstead) se despierta incapaz de recordar nada en donde solo cuenta con la compañía de un tenebroso señor (John Goodman) que le asegura que ahí están a salvo ya que el exterior ha sido arrasado por un ataque químico pero ¿será verdad o una simple excusa para retenerla contra su voluntad? Calle Cloverfield 10 es una secuela directa de Monstruoso (Cloverfield) y es un excelente ejercicio de género terroríficamente adecuado para los desafortunados momentos que estamos atravesando ahora mismo.

13. Buried (Enterrado) Rodrigo Cortés, 2010 (Movistar+) 

Justo después de ser secuestrado por desconocidos, Paul Conroy (Ryan Reynolds), un contratista civil norteamericano en Irak, se despierta enterrado vivo en un ataúd de madera con sola ayuda un teléfono móvil y un mechero para tratar de escapar con vida. Así y durante casi hora y media el director Rodrigo Cortés juega con nuestra paciencia para poner a prueba las habilidades del protagonista y dejar de paso constancia de lo que es un perfecto ejercicio de tensión y del mejor cine de suspense con unos mínimos recursos audiovisuales. Una película que ya ha pasado a la Historia de cine por razones evidentes.

14.  La visita, M. Night Shyamalan, 2015 (Movistar+) 

La visita supuso el esperado regreso del nominado a un Oscar M. Night Shyamalan, director de la excelente El sexto sentido. Tras fracasar con algunos títulos el nuevo maestro del suspense decidió irse a una pequeña localidad Pensilvania para rodar con un muy bajo presupuesto un inquietante cuento de terror protagonizada por dos niños pequeños que van a pasar una semana de vacaciones a casa de sus abuelos.

Una vez allí nada es como esperaban y sus abuelos en cuestión se comportan de una forma que les hace creer que han sido fruto de alguna extraña posesión.

15. Repulsión, Roman Polanski, 1965 (Filmin)

El legendario director Roman Polanski tiene todo un master en aquello de rodar películas en una sola localización. Fruto de esta particular obsesión rodó la conocida como “la trilogía del apartamento” formada por La semilla del Diablo (1968), El quimérico inquilino (1976) y la que nos ocupa Repulsión film con el que se inició en este inquietante subgénero. Una joven y preciosa Catherine Deneuve interpreta a Carol Ledoux, una muchacha reprimida que vive con su hermana Helen en un apartamento de Londres. A Carol las relaciones sexuales y el confrontamiento con el sexo opuesto le genera sentimientos contradictorios de atracción y repulsión.  Cuando su hermana y su pareja se marchan de vacaciones, Carol se quedará sola en el piso y comenzará a tener alucinaciones cada vez más reales que la harán dudar de su propia cordura y la empujan a una tóxica espiral de deseo.

Una joya única y rara como pocas.