Analizando los Oscars: Mejor actriz | La Cabecita

Suele pasar con bastante frecuencia, no recuerdo ningún año que la categoría de Mejor actriz fuera superior que la de actor. Está claro que en Hollywood los papeles más atractivos son siempre los masculinos. De hecho, basta con ver las nominadas de este año, tan solo una de las actuaciones me parece realmente memorable, y de las que se han quedado fuera, aunque varias me parezcan mejor que las nominadas, tampoco puedo destacar a ninguna en exceso. Veamos cuáles son las actrices nominadas de este año.

Marion Cotillard por Dos días, una noche

Dos dias

Segunda nominación para Marion Cotillard, después de ganar el Oscar por La vida en rosa. Además, es la segunda vez que la actriz está nominada por un papel en francés. No comprendo demasiado bien la nominación de Cotillard. Por un lado está claro que la película en Estados Unidos no ha sido vista, de hecho, ni siquiera pasó el corte en la categoría de habla no inglesa. Por el otro, me parece lo único negativo de la película de Los hermanos Dardenne. El cine de los Dardenne, que tiene su base en el neorrealismo italiano, es un cine que fluye desde la pura naturalidad, no es raro que suelan recurrir entonces a actores que han descubierto ellos como Jérémie Renier y Olivier Gourmet, que se adaptan a la perfección al tipo de actuación naturalista que buscan los cineastas belga. En El niño de la bicicleta probaron a darle el papel protagonista a una actriz con nombre como Cécile De France, es una jugada lógica, pues esto abre mucho más las puertas internacionales de la película, aquello les salió bien, y en su nueva película trataron de repetirlo con Cotillard. El problema que me encuentro con Marion Cotillard es el hecho de que me parece una actriz fantástica en melodramas intensos, como era aquella La vida en rosa, pero es justo lo contrario a lo que buscan los Dardenne en su cine. En Dos días, una noche simplemente no me la creo. Su nominación se debe en gran parte también a cuando se quedó a las puertas de conseguirla (mucho más merecidamente) por De óxido y hueso. Que gane es imposible. Ha entrado de rebote, y además sería un Oscar muy cercano al anterior y como hemos dicho al principio, de nuevo por un papel que no ha sido rodado en inglés.

Rosamund Pike por Perdida

Perdida

Aquí tenemos a la que es sin duda la más brillante de las actuaciones femeninas nominadas. Es el primer papel de peso de Pike en el cine, y también su primera nominación, aunque lleva una gran carrera a sus espaldas y en películas como El mundo según Barney ya había demostrado sobradamente su talento. El acierto de casting es esencial en este papel, es realmente un papel complicado de interpretar y pocas actrices darían el perfil. ¿Se imaginan a Reese Whitherspoon primera actriz se sonó para protagonizarla, dando vida a Amy Dunne? Y recalcamos el nombre de Amy Dunne, porque también es clave, Pike ha inmortalizado a su personaje entre los grandes de la historia. Aquí tiene la ardua tarea de dar vida a una cándida psicópata, capaz de parecer aterradora y frágil al mismo tiempo. Y no hay un solo momento en el que no te la creas, ni uno, en el que no te haga dudar si realmente esta mujer es una víctima o el mismo demonio. Si el mundo fuera justo, Pike debería ganar y, de hecho, fue la que más premios de la crítica se llevó. Su problema se llama Julianne Moore y que este año le toca ganar el Oscar que ya debe, aún así, de haber alguna sorpresa, sería Pike quien la daría. El papel de Perdida la ha elevado al mainstream hollywoodiense, así que si sabe elegir bien sus papeles, es bastante probable que la volvamos a ver en la carrera más pronto que tarde.

Reese Witherspoon por Salvaje

Salvaje

Segunda nominación para Reese Witherspoon después de ganar el Oscar por En la cuerda floja. Como la nominación de Sandra Bullock el año pasado, la nominación de Witherspoon parece una justificación de que aquel premio era merecido (y es cierto que Witherspoon estaba fantástica, pero resulta difícil olvidarse que aquel año también estaba nominada Felicity Huffman con su inolvidable transexual de Transamérica). Justo en el párrafo anterior hablábamos de lo equivocada que habría estado la actriz en el papel protagonista de Perdida, pero lo cierto, es que algo similar le pasa en Salvaje. Los problemas no son suyos, Reese es una buena actriz, y cuando encuentra personajes que le van al dedo, como la protagonista de Election, está fantástica. Pero tiene el hándicap de tener una cara demasiado bonita y feliz para ciertos papeles, y resulta verdaderamente complicado creérnosla en el papel de esta sufrida mujer que está emprendiendo una larga caminata. Su eterna cara de felicidad, algo contra lo que no puede combatir, le resta credibilidad al personaje. Desde luego no merecía la nominación, aún así ha conseguido estar presente durante toda la carrera, pero el Oscar está demasiado lejos de su alcance.

Julianne Moore por Siempre Alice

Siempre

No sé que me resulta más terrible, si que ésta sea sólo la quinta nominación al Oscar de Julianne Moore (lo estuvo antes por Boogie Nights, El fin del romance, Las horas y Lejos del cielo), que no lo haya ganado nunca, o que haya tardado ¡12 años! en volver a estar nominada. Lo peor de todo es que Hollywood, que intenta siempre pagar sus deudas, va a resolver este error por la puerta de atrás. Algo parecido a cuando le dieron el tercer Oscar a Meryl Streep por la horrible La dama de hierro, ¿no hubiera sido mejor premiarla, por ejemplo, por Los puentes de Madison? Sí, Moore está fantástica en Siempre Alice, de hecho es lo poco rescatable de la película, pero no hay que olvidar que esta señora está bien siempre. Siempre Alice es una de las peores películas de su filmografía, una obra extremadamente facilona, muy mal escrita, y con tufillo a telefilm de Lifetime (maticemos esto, pues no es lo mismo ser un telefilm de Lifetime que de HBO). Ganará, sencillamente porque no se lo dieron cuando tenían que habérselo dado, y en Hollywood no se permiten estas deudas históricas, pero cuando en un par de años vuelva con una gran película por la que tendría que haber ganado, posiblemente entonces no se lo den porque ya tiene éste. Así de ilógica llega a ser la Academia.

Felicity Jones por La teoría del todo

Teoria

Vamos a decirlo ya, nos vuelve locos Felicity Jones. Ésta es su primera nominación al Oscar, pero bien podría haber sido la segunda si la Academia hubiera considerado su maravillosa actuación en Like Crazy (Como locos). En La teoría del todo la actriz tiene una complicada tarea, ser la compañera de un esplendido Eddie Redmayne, en una película que además, no deja de ser una obra sobre Stephen Hawking. Pero lo es también sobre su relación con Jane Hawking, y ahí entra en juego una espectacular Jones, capaz de canalizar primero el amor y la admiración que siente hasta este hombre, y luego el dolor y las dudas que le despierta el hecho de estar a su lado. Al fin y al cabo, y aunque quizá de una forma mucho menos visible, lo que hace Jones es tan clave como lo que hace Redmayne para que la película funcione. No ganará, aunque con la de Pike me parece la mejor actuación de las nominadas. Aún así, es muy joven, y tiene talento a raudales, así que no sería de extrañar que más pronto que tarde acabase alzándose con la estatuilla.

Las olvidadas

olvidadas

Creo que de manera generalizada nos dolió la ausencia de Jennifer Aniston por Cake, nos alegrábamos tanto de su presencia en la carrera sin haber visto la película, que queríamos incluso que ganase (bueno, al menos aquellos que por edad, fuimos marcados por Friends). Una vez vista la película, lo cierto es que Cake es una película bastante mala, que adolece de todos los problemas del cine indie. Aún así, está claro que Jennifer Aniston hace una de las mejores interpretaciones de su carrera, es lo único que evita que la película se hunda. Lo de menos es el cacareado hecho de que Aniston actuase sin maquillaje, sino el dolor que impregna a su personaje. Su nominación habría sido una oportunidad única para que Aniston se resarciese como actriz, una verdadera pena que finalmente no lo haya logrado.

Al igual que ocurre con Julianne Moore, Amy Adams es otra de las grandes olvidadas, a sus muy bien cumplidos 40 años, ya acumula cinco nominaciones al Oscar, este año podría haber recibido la sexta por Big Eyes, es sin duda lo mejor de la película de Tim Burton, y ya se hizo con el Globo de Oro. Desde luego que la película no ha gustado tanto como debería, pues es lo mejor de su realizador en años, pero Adams había hecho méritos más que de sobra para conseguir una nueva nominación. Con su currículum, nos aventuramos a decir que no pasarán más de diez años sin que haya ganado el Oscar, e incluso es posible que si finalmente acaba dando vida a Janes Joplin, el premio le llegue en tan solo dos años.

No podemos dejar de recordar de lo fantástica y divertida que está Emily Blunt en Into the Woods, para quien esto escribe, un papel mucho más merecedor de nominación que el de Meryl Streep. Y tampoco, y vamos a hacer como hemos hecho muchas veces durante este especial, defender los grandes éxitos comerciales, nos podemos olvidar del tierno personaje al que da vida Shailene Woodley en Bajo la misma estrella, un papel que por mucho que sea dentro de una película comercial, le podía haber valido a la joven actriz la nominación que le negaron por Los descendientes.

¿Quién ganará?: Julianne Moore
¿La alternativa?: Nos gustaría pensar que Rosamund Pike es una alternativa real, pero es un premio que parece bastante cantado.