La gran estafa americana – American Broken Dream | La Cabecita

Amy Adams

Estafas, crímenes varios, corrupción política, blanqueo de dinero… No amigos, no estamos hablando de la situación actual de España, hablamos de todo lo que rodea a La gran estafa americana, la nueva película de David O. Russell. La nueva obra dirigida por el director neoyorquino nos traslada a los años 70 donde una pareja de hábiles estafadores se verán obligados a colaborar con el FBI con el fin de investigar y pescar a reputados cargos políticos presuntamente corruptos.

Después de dirigir la deliciosa El lado bueno de las cosas, una de las mejores comedias románticas de los últimos años, deudora del mejor cine de Billy Wilder, David O. Russell decidió ponerse al frente de este ambicioso thriller cuyo guión escribió a medias con Eric Singer. Para ello reclutó a los protagonistas de su última película, Jennifer Lawrence y Bradley Cooper y a Christian Bale y Amy Adams, quienes trabajaron con Russell en la también genial The fighter. Buen reparto, una trama aparentemente atractiva, un director que sin ser brillante empieza a ganar cada vez más peso entre los grandes de Hollywood… Todo parece apuntar a que, en principio, vamos a estar ante una de las películas del año. Pero la realidad es muy distinta, y es que La gran estafa americana  aún siendo una buena película, no termina de ser del todo redonda. Los motivos son muy diversos.

Empezando por el brazo ejecutor, es decir, la dirección de David O. Russell. Ya en sus anteriores películas el de Nueva York demostró ser un director correcto, pero no magnifico. Tanto en The fighter como en El lado bueno de las cosas Russell realizaba una dirección digna y correcta, pero la realidad es que ambas películas brillan por su reparto o por su guión más que por el trabajo tras las cámaras de Russell. Es en La gran estafa americana donde las dotes de dirección de David O. Russell quedan más en evidencia. Una vez más vuelve firmar una dirección digna y suficiente, pero en un proyecto tan ambicioso como este se echa mucho en falta la mano de un director con un estilo más personal, más depurado y más acostumbrado a lidiar con proyectos de mayor envergadura. Es imposible no pensar en Martin Scorsese cuando vemos La gran estafa americana, pues es un proyecto muy del estilo del director ítaloamericano. No en vano Russell intenta “imitar” de alguna manera el estilo de Scorsese en algunos tramos del film, pero como suele ocurrir con las imitaciones, la copia rara vez llega al nivel del original. También Russell parece hacer ciertos guiños al cine de Quentin Tarantino en La gran estafa americana, pero al igual que ocurre con la imitación de Scorsese, el amigo David sale muy perjudicado en esa comparativa. Podríamos decir que la dirección de Russell resulta buena y creíble, pero con otro director estaríamos ante una película mejor. Con ese toque de violencia (no gratuita, por supuesto) y de cine callejero de Martin Scorsese, la película hubiera resultado ser bastante más redonda.

Christian Bale;Bradley Cooper;Jeremy Renner

También tiene culpa el guión de la falta de brillantez de la película. La trama es interesante y el punto de partida es genial, pero poco a poco el film se va llenando de altibajos y se va desinflando paulatinamente. La sensación final que queda es que la película acaba siendo un poco sosa en su valoración final. A pesar de todo, la historia de estos estafadores no deja de ser, como poco, interesante a pesar de su falta de originalidad.

Donde realmente brilla La gran estafa americana es, sin lugar a dudas, en el buen trabajo de su estelar reparto. Empezando por una Amy Adams tan inspirada como sexy (esos escotes pasarán a la historia) que se come la pantalla en cada escena. La guapa actriz nacida en Italia realiza en La gran estafa americana una de sus mejores interpretaciones, que la confirman como una de las mejores actrices del Hollywood contemporáneo. Junto a ella, Christian Bale comparte el protagonismo de la cinta realizando también una gran interpretación. Hemos visto a Bale excesivamente musculado  interpretando a Batman y desagradablemente esquelético en El maquinista, en La gran estafa americana lo vemos gordo y estropeado, dando un nuevo registro a su larga lista de cambios estéticos en sus películas. En el plano más secundario encontramos a la pareja protagonista de El lado bueno de las cosas, que realizan interpretaciones de calidad muy diferente. Jennifer Lawrence está estupenda, reitera que ya no es una promesa si no una realidad. Su personaje, tan sexy como atontado, pasa bastante desapercibido en un principio pero a medida que avanza la película va ganando cada vez más peso y acaba siendo fundamental para el desarrollo y desenlace del film. En cambio Bradley Cooper resulta ser sin duda el menos acertado de todo el reparto. El actor de Filadelfia sobreactúa demasiado en algunas partes de la película quedando su actuación poco creíble respecto a la de sus compañeros de reparto. En un plano aún más secundario, Jeremy Renner regala una actuación bastante correcta pese a su horroroso peinado.

Russell nos habla en su película de la estafa y el engaño, aunque en realidad eso es solo el envoltorio de lo que realmente nos quiere contar. El director neoyorquino parece querer hablarnos de la amistad y la lealtad, y también del amor. La complicidad en las relaciones personales de los personajes resulta fundamental para lograr comprender cual es la finalidad de La gran estafa americana. Esa finalidad es que los engaños y las mentiras al final pasan factura. No se puede basar la vida de las personas en el vil engaño. Al final queda el vacío, el vacío provocado por la farsa que representan las relaciones entre los personajes, y por ende, el verdadero vacío que supone una vida basada en mentiras. El mensaje del film resulta ser genial, pero su guión ligeramente endeble no consigue que llegue a calar demasiado hondo tan inteligente mensaje.

América, tierra de oportunidades (o eso dicen ellos), lugar donde los ciudadanos tienen el derecho de perseguir sus objetivos y sus sueños, el llamado “Sueño Americano” queda en evidencia en la película. La estafa y el engaño como modo de vida, como manera de conseguir la felicidad, de una manera tan mezquina como poco ética. Tras ellos, un atajo de celebridades políticas que buscan enriquecerse de cualquier forma antes que cumplir con su deber, que es el de ayudar al ciudadano. El “American Dream” queda retratado como otra gran estafa más, un sueño totalmente roto y vilipendiado, la verdadera gran estafa americana.

Jennifer Lawrence

La gran estafa americana no es una mala película, ni mucho menos. Es un buen thriller con un guión y una dirección aceptables y un elenco en el que casi todos los miembros cumplen con nota. El problema es que, aunque deja buen sabor de boca, el espectador lamenta que no hubiera sido algo más, una película verdaderamente brillante. Quizás parte de la culpa de esta pequeña decepción que supone La gran estafa americana puedan recaer en las altísimas expectativas que provocó con su gran victoria en los Globos de Oro y sus 10 nominaciones a los próximos premios Oscar. En los pasados Globos, la película de Russell se alzó con 3 galardones: el de Mejor película en la categoría de comedia o musical, el de Mejor actriz principal para Amy Adams y el de Mejor actriz secundaria para Jennifer Lawrence. Solo en los premios interpretativos creemos que se hizo justicia, puesto que tanto Adams como Lawrence están extraordinarias en sus roles. En cambio en la categoría de mejor película cómica creemos que había películas bastante mejores que la de Russell, como El lobo de Wall Street o A propósito de Llewyn Davis. A raíz de esto, parece que las 10 nominaciones a los Oscar que ha cosechado La gran estafa americana se antojan excesivas para una película que parece ser muy del gusto de la prensa y de la Academia, pero que en definitiva no termina de ser del todo redonda.

Sea como fuere y dejando a un lado el tema de los premios, La gran estafa americana es un film que deja un buen sabor de boca en el espectador y que merece la pena ver sobre todo para disfrutar de un maravilloso y acertado reparto y de una historia que, cuanto menos, es interesante de conocer. No es la gran obra que muchos esperábamos y nos queda la sensación de que podría haber sido una mejor película con otro planteamiento, pero aún así la nueva cinta de David O. Russell resulta ser un atractivo thriller muy disfrutable. No es perfecta, no es sobresaliente, tampoco magnífica, pero podemos asegurar totalmente que La gran estafa americana es una buena película.

3.5_estrellas

Ficha técnica:

Título original: American Hustle Director: David O. Russell Guión: Eric Singer, David O. Russell Música: Danny Elfman Fotografía: Linus Sandgren Reparto: Christian Bale, Amy Adams, Bradley Cooper, Jennifer Lawrence, Jeremy Renner, Louis C.K., Michael Peña, Jack Huston, Alessandro Nivola, Shea Whigham, Paul Herman, Elisabeth Röhm, Saïd Taghmaoui, Adrián Martínez, Robert De Niro Distribuidora: TriPictures Fecha de estreno: 31/01/2014